Y ciertamente, aun estimo todas las cosas
como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por
amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo, y
ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es por la ley, sino la
que es por la fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe; a fin de
conocerle, y el poder de su resurrección… Filipenses 3:8–10a
Hay
algo que me gustaría hacer notar entre nosotros, y es esto: La Señal más grande
que tenemos los cristianos es la Resurrección de Cristo. Jesús dijo refiriéndose a su vida: “Nadie me la quita, sino que yo de mí mismo
la pongo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla a tomar. Este
mandamiento recibí de mi Padre” (Juan 10:18). Pablo argumentó: “Porque si no hay resurrección de muertos, tampoco
Cristo resucitó. Y si Cristo no resucitó, vana es entonces nuestra predicación,
vana es también vuestra fe. Y somos hallados falsos testigos de Dios; porque
hemos testificado de Dios que él resucitó a Cristo, al cual no resucitó, si en
verdad los muertos no resucitan. Porque si los muertos no resucitan, tampoco
Cristo resucitó; y si Cristo no resucitó, vuestra fe es vana; aún estáis en
vuestros pecados. Entonces también
los que durmieron en Cristo perecieron. Si en esta vida solamente esperamos en
Cristo, somos los más dignos de conmiseración de todos los hombres” (1
Corintios 15:13–19).
La realidad y la historicidad de la resurrección es el pilar más
importante de la fe cristiana. Al levantarse Jesús de los muertos comprobó ser
el poderoso Hijo de Dios, con el mismo Espíritu de santidad de Dios (Romanos
1:4). Jesús profetizó su resurrección y resaltó que cuando se levantara de los
muertos, daría con esto una señal auténtica a su afirmación de que Él era el
Mesías. Su resurrección fue el sello de su mesiazgo.
I. La Resurrección de Cristo Tiene el Poder de
Justificar al que Cree (Romanos 4:25). Estaríamos en nuestros pecados sin
salvación (1 Corintios 15:17). Todas las exigencias de Dios para la salvación
del hombre fueron completamente satisfechas con el sacrificio de Cristo en la
cruz, así que la resurrección de Cristo nos asegura la salvación a todos los
que creemos en El (Romanos 10:9).
II. La Resurrección de Cristo Tiene Poder Porque Nos
Garantiza la Victoria. Los cristianos no podríamos vivir en victoria a no
ser por la resurrección de Cristo. Esta es la razón por la que los apóstoles
podían soportar el sufrimiento y el dolor. Su victoria estaba consumada en la
resurrección.
III. La Resurrección de Cristo Tiene Poder Porque
Garantiza Nuestra Resurrección. La resurrección de Cristo es la primicia de los
frutos de la resurrección, y la prueba y garantía de la resurrección de todo
creyente (1 Corintios 15:20; 1 Tesalonicenses 4:13, 14, 17). Le
veremos como Él es porque seremos glorificados. Veremos a Dios porque serán
quitados nuestros pecados y seremos puros, de otra manera, nuestros ojos no
podrían conocerlo. La expresión de 1 Corintios 13:12 — …entonces conoceré como fui conocido — no se hará realidad hasta
nuestra glorificación, porque entonces sabremos cuanto pecado y vergüenza
llevábamos sobre nosotros, y cuánto el Señor nos quitó. Seremos capaces de
mirar atrás y ver realmente de dónde el Señor nos sacó. La esperanza pertenece
a aquellos que confían en Cristo para la salvación de sus almas y la
resurrección de sus cuerpos. Así que, animémonos entre nosotros con estas
enseñanzas bíblicas (1 Tesalonicenses 4:13–18).
No comments:
Post a Comment